A dos semanas de la agresión al joven Gaspar Rivas, de 17 años, a la salida de una fiesta en el club Paraná, el adolescente se recupera favorablemente, ya de alta en el Hospital Santojanni, donde fue trasladado de urgencia para una intervención quirúrgica que le salvó la vida, pero todavía sin poder regresar a San Pedro.

Su madre, Mercedes Utges, informó que Gaspar evoluciona “día a día, tanto en el posoperatorio como en lo neurológico, sin presentar al día de hoy secuelas en su comportamiento o motricidad”.

La familia Rivas informó además que tienen por delante un plazo de 180 dás para una “cirugía de craneoplastia donde se le colocará una prótesis de cemento líquido”, que sería el último tramo médico de lo que denominaron “este angustiante proceso”.

Gaspar Rivas tiene confirmado el alta pero los médicos del hospital Santojanni solicitaron a sus padres que estén “alerta a algunos síntomas (fiebre dolor o falta de coordinacion)”, por lo que no los autorizaron a retornar a Sn Pedro “debido a la distancia, no recomendable en estos casos”.

En materia judicial, la familia se presentó como particular damnificado ante la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil que conduce José María Gudagnoli y que tiene a su cargo la causa penal por la agresión contra Gaspar Rivas.

El fiscal imputó el delito de “tentativa de homicidio” a cuatro jóvenes que participaron de la reyerta que La Opinión reconstruyó tras acceder a los videos de cámaras de seguridad que obran en el expediente y que muestran el momento del ataque a baldosazos contra el grupo del joven herido.

La familia Rivas señaló que espera que la Justicia “actúe como lo viene haciendo” y que “este caso nos sirva para rever la educación y acompañamiento hacia nuestros jóvenes, de manera de no tener que sufrir más hechos de violencia como este”.