Ariel reportó: “Me parece una vergüenza. Desde las 7 de la mañana en la salita de Los Aromos y el doctor avisa recién 9.16 que hoy no va. Dos horas la gente mojándose, esperando que el señor vaya. Mi cuñada necesitaba un medicamento porque tiene epilepsia. La gente se enoja con las enfermeras, peor no tienen la culpa. Es muy buena la atención, siempre tienen buena cara, lástima el dr, que a final de mes cobra su sueldo igual”.
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