Desde hace ocho días los vecinos de Santa Lucía y zona rural aledaña están incomunicados. El tira y afloje por el alquiler de un predio en un campo de la localidad donde se emplaza la antena que permite las comunicaciones de telefonía celular de la empresa “Claro”, tiene de rehenes a los abonados de ese sector. El convenio comenzó a regir en el año 1994, con vencimiento a diez años y fue renovado por un período de cinco años. Este año, vencido el contrato, el propietario del terreno, Jorge Ceballos, pretendió modificar la modalidad de actualización del monto del alquiler, que regía por el INDEC, y la empresa cortó todo tipo de negociaciones. Fuera del radio afectado por el acuerdo, en inmediaciones de la vivienda del titular del terreno, fue ubicado, palabra mediante, el pilar con el medidor que provee de energía eléctrica a la planta. Inconvenientes surgidos a principios de la semana pasada, motivaron la visita del lugar de un ingeniero de la empresa, quien no pudo realizar su tarea ante el impedimento impuesto por el propietario del lugar. Mientras tanto, los vecinos radican denuncias ante organismos oficiales tratando de regularizar la situación que los mantiene incomunicados, juntan firmas para entregar al Intendente y concretarán una comunicación con el coordinador regional de la Defensoría del Pueblo de la Nación, Carlos Bermúdez, quien prometió realizar el reclamo para lograr el descuento de los días en que no tuvieron servicio y restituir lo más pronto posible las comunicaciones. Problemas similares se registraron en las ciudades de Colón y San Nicolás, por supuesto resueltos con mayor celeridad por la distante cantidad de abonados con los que cuentan.
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