El joven rosarino que dejó su bicicletería para viajar en piragua y bicicleta hasta Uruguay cumplió su cometido. Una de las paradas intermedias fue San Pedro, en donde lo azotaron los primeros fríos de la temporada.
Cobijado en el Club Náutico San Pedro Martín recorrió la ciudad en bicicleta y llegó a las oficinas de La Opinión. Relató su odisea y su intención de llegar al país vecino y así cargó el rodado en su piragua y partió.
Tras el paso por Entre Ríos, en donde colaboró con las personas afectadas por la inundación, finalmente llegó a destino y ahora su idea es alcanzar a Brasil.