“Así arrancamos la mañana” dijo el propietario de un local de venta y reparación de celulares cuando constató que habían roto dos candados y la puerta de su comercio para llevarse un botín que teme que sea comercializado de inmediato.

Mientras radicaba la denuncia intentaba generar un alerta para que la población aporte datos que puedan ayudar al recupero de lo robado ya que por lo general los aparatos terminan vendiéndose a bajo precio en redes sociales o dentro de una cadena de individuos que se dedican al tráfico de este tipo de botines.

“Yo mismo se los compraría” explicó la víctima del saqueo para explicar que lo que más le preocupa son los teléfonos que le confiaron los clientes. Pidió que quien tenga algún indicio se lo haga saber.