La trifulca que se desató en la fiestita de fin de curso del jardín 903 en el club América terminó con mujeres heridas trasladadas al Hospital, con cuatro personas aprehendidas por la policía, entre ellas un menor de edad y tres cuchillos secuestrados que estaban en la escena.

Todo comenzó dentro de la propia fiestita, en medio del evento y antes de que muchos niños y niñas bailaran, algo que consternó a las familias que esperaban pasar una jornada emotiva con sus hijos y se encontraron en medio de una batahola.

Dos familias que tienen conflictos de larga data, en cuyo marco hubo en otras oportunidades viviendas incendiadas y hasta personas asesinadas, discutieron dentro de la fiesta del jardín y empezó la pelea.

La intervención policial en la zona terminó con una mujer de 30 años detenida, acusada de haber provocado las lesiones que presentó otra de 41 que fue trasladada al Hospital por una ambulancia del Servicio de Emergencias Same 107. En su poder tenía un cuchillo tipo Tramontina.

Además, aprehendieron a otra mujer de 46 años que entre su ropa tenía un cuchillo de los denominados “verijeros” y a un adolescente de 13 años que también tenía un arma blanca encima, un cuchillo tipo de caza que tenía manchas de sangre. Ya en el Hospital, también fue aprehendida una adolescente de 19 años que obstaculizó la labor policial.

En la causa intervino inicialmente la Fiscalía 11 que conduce Viviana Ramos, quien dispuso que la acusada de provocar las lesiones a la herida quede alojada para prestar declaración indagatoria, mientras que las otras aprehendidas recuperaron la libertad. Respecto del menor de edad, tomó intevención la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil, que ordenó restitución a familiares.

La mujer que resultó lesionada presentaba heridas en la cabeza, el cuello y la cara, provocadas por golpes, y una lesión punzo cortante de alrededor de medio centímetro de profundidad en el torso. Quedó internada en observación en la Guardia, fuera de peligro.

“Todo adelante de los nenes, una vergüenza”, se quejaron testigos de lo ocurrido, que aseguraron que la fiesta quedó a medio desarrollar producto “del quilombo infernal que se armó”.