Luego de la aprobación del paquete de ordenanzas relacionadas con el Presupuesto 2020, el Concejo Deliberante entró en un receso de verano poco productivo, a pesar de que sólo un tercio del total del cuerpo pidió licencia durante la temporada estival, es decir para tomar vacaciones.

La nueva composición del cuerpo tuvo alguna participación en reuniones con vecinos autoconvocados por la inseguridad y cierta presencia diaria en el edificio de Pellegrini y 9 de Julio, aunque la actividad no se vio reflejada en la producción de iniciativas legislativas, que fueron sólo tres y de la misma fuente.

La semana que viene, con marzo, comenzará el período ordinario de sesiones, con el Mensaje Anual del intendente.

Las sesiones seguirán los segundos y cuartos jueves de cada mes, a las 14.00, luego de que debatieran la posibilidad de volver al horario administrativo de la mañana, aunque hubo planteos relacionados con las tareas extradeliberativas que muchos ediles tienen.

De los 18 concejales que integran el cuerpo deliberativo local, sólo seis pidieron licencia en lo que va del año, se entiende que para tomar vacaciones, aunque algunos pidieron 48 horas. Todos los expedientes ingresaron desde el Frente de Todos, es decir que los integrantes de Juntos PRO y Juntos UCR no tuvieron ninguna ausencia durante el verano.

Aunque hubo versiones relacionadas con un presunto acuerdo interno para no pedirse los días para tomarse vacaciones, porque las licencias en el Concejo son siempre sin goce de sueldo, nadie las confirmó. La dieta “pura” está en alrededor de 150 mil pesos y se engrosa, en algunos casos mucho, por la antigüedad en el Estado de cada uno.

Pedir licencia implica no cobrar una buena suma de dinero: de la “dieta pura” son alrededor de $ 5 mil por día.

La primera en tomar licencia fue la presidenta del Concejo Deliberante, Mónica Otero, quien el 31 de enero dejó el HCD para asumir como intendenta interina ante las vacaciones de Ramón Salazar, que asumió el interinato el 9 de diciembre, cuando su padre, Cecilio, aceptó el ofrecimiento de integrar el directorio de Trenes Argentinos Cargas en la órbita del Ministerio de Transporte de la Nación. Claro que en este caso no fue por vacaciones sino para asumir la máxima autoridad política de la ciudad y gobernar durante los primeros 15 días de 2022.

La segunda fue Tamara Vlaeminck y, según difundió en sus redes, para irse de vacaciones. La concejala de La Cámpora en el Frente de Todos solicitó licencia sin fecha de retorno el 10 de enero, aunque regresó el 17, y en su lugar asumió el referente del Partido Comunista Roberto “Tati” Escalzo, que conformó espacio de trabajo con Florencia Sánchez, puesto que fue en 2021 parte del intento de conformar lista del pangarismo y otras organizaciones disidentes con la inclusión de Salazar en el oficialismo nacional y provincial.

Ese dúo disidente dentro del Frente de Todos fue el generador de los primeros proyectos de ordenanza ingresados al Concejo: la propuesta para crear un espacio para jóvenes denominado “Parada Joven” y la de crear un programa de forestación y reforestación bajo el título de “Plantá verde, plantá vida”.

La concejala Sánchez presentó el otro proyecto de iniciativa de integrantes del legislativo en lo que va del año, relacionado con una solicitud al Gobierno para que ponga en valor la plaza ubicada frente a la escuela 11.

Los otros dos proyectos que ingresaron al Concejo en lo que va de 2022 llegaron desde el Ejecutivo: la declaración de interés social para la escrituración de las 49 Viviendas; y el régimen de bonificaciones para jubilados en las tasas municipales.

En el período de receso no hubo una sola sesión extraordinaria en el Concejo Deliberante.

El resto de los expedientes fueron las pocas licencias de los pocos ediles que se tomaron vacaciones —o que lo dejaron expresado ante el HCD, al menos— durante este verano, y las excusaciones de suplentes que decidieron, por diversas razones, no asumir la banca y dejar lugar al siguiente.

Luego de Mónica Otero y Tamara Vlaeminck, llegó el pedido del edil y sindicalista portuario Matías Franco, que estuvo de licencia en el Concejo Deliberante entre el 31 de enero y el 4 de febrero.

María Florencia Sánchez pidió licencia entre el 7 y el 14 de febrero, momento en el que, de acuerdo a lo que la propia edila difundió en sus redes sociales, tomó vacaciones junto a su esposo.

El presidente del bloque oficialista, Juan Cruz González, elevó solicitud de licencia para los días 17 y 18 de febrero, jueves y viernes, aunque en el Concejo Deliberante no se lo vio desde el viernes anterior, el 11.

Su expediente ingresó luego de que apareciera una canción del artista Gaby Torres, clásico cronista musical de los acontecimiento políticos municipales, que versaba sobre alguien que se fue de vacaciones sin pedir licencia, lo que provocó que todos comenzaran a preguntarse de quién se trataba.

El último fue el concejal del Frente de Todos Daniel Creus, quien solicitó licencia entre el lunes 21 y el viernes 25, lo que le permite empalmar vacaciones con el fin de semana extralargo de Carnaval hasta el 2 de marzo, primer día hábil de la semana que viene y fecha para la inauguración de las sesiones ordinarias, con Mensaje Anual del intendente incluido.

El resto de los concejales no pidió licencia durante enero y febrero, por lo que se sobreentiende que este año no tuvieron vacaciones estivales: Paola Basso, Hugo Binimelis, Lucas Pisani y Alejandro Donatti, de Juntos (UCR); Gerardo Pelletier y Vanina Cappelleti, de Juntos PRO; y Gastón Casco, Rosa Celié, Candelaria Cuscuela, Juan Garavaglia, Silvina Ibern y Rita Leguizamón.